La primera etapa del Raid fue llegar a Redondela el viernes por la tarde... atasco de salida, en la carretera, un incendio, dos accidentes. Ibamos muy contentos pero que muy puteados.
Las noticias decían que Paco salía con los churumbeles endrogaos. Lolo debería tomar un avión el sábado... huelga de pilotos de Iberia, Fran pensaba que le iba a tocar hacer cuatriplete y empezó a reirse de forma nerviosa y compulsiva.
Por fin llegamos y nos encontramos con los amigos de Guadalajara, con nuestra Escuela de Campeones, con la gente de la organización. Al hostal a cenar y a dormir, que mañana toca correr. Y ahí empieza la primera prueba especial... me toca compartir cama con Fer (al que apodamos en el equipo el Tres Piernas o el Makelele blanco). Espero que no le de por picar balizas por la noche... mientras Celia se da la vuelta y se pone los tapones, porque aviso que estoy un poco congestionado y a veces ronco un poquito…
Bueno, la noche no ha sido tan dura. No noto nada al caminar. Desayunamos y nos preparamos. Vemos a Aure, Fran y los tres o cuatro equipos gallegos que suelen ir como tiros. Va a estar jodido el podium. Nos dan el mapa y tengo la sensación de que no vamos a poder ir a por todas.
Mi gozo en un pozo. Comentamos la estrategia… y a correr como verdaderas guarras en matanza. Veo que Fer va muy muy fuerte y le pido que baje el ritmo. Al resto ni les vemos porque nos vamos con Abarth a por dos balizas que valen poco. Y empieza el show de aldeas, pistas, caminos, pistas asfaltadas... un par de cagadillas sin importancia y nos metemos en el monte. Joder, esto pica para arriba. Primeros tojos, mis piernas se empiezan a hinchar. Peazo de calor. Me doy cuenta que hay caminos, cortafuegos y conducciones que no vienen en el mapa… cuando tardo 10 minutos en encontrar una baliza en teoría muy sencilla. No veo muchos equipos por la zona, por lo que pienso que la estamos cagando o que vemos muy bien. Seguimos con más tojos, subidas fuertes y catapún para la playa. No nos da tiempo de ir a todas las especiales, por lo que elegimos ir al kayak y pasar un rato fresquitos, porque hace una calorina… bueno, al final hacemos la especial y penalizamos dos minutos porque aunque la organización dice que hay 13 kayak, yo sólo veo 6. En fin.
Resulta que casi todos los equipos lo han bordado. Abarth y del Norte pican todo, Planetas todo menos el kayak… joder, va a tocar seguir corriendo. Barrimore, que llega exhausto, ha cometido una de sus célebre Barrimoradas y empieza en negativo (casi). Con lo que correis cabrones….
Por la tarde, Fer se quita ropa y sale con Celia, que sigue teniendo el tobillo como una berenjena de Almagro. Cómo le gusta sufrir a la jodía. Hace un calor de muerte, me apiado de ellos porque la etapa va a ser un infierno. Me lo confirman en la llegada. Fer llega como un pollo asado, Celia no habla (lo que significa que le duele mucho el tobillo). Fran y Lolo han perdido 18 kilos cada uno y entran caminando. Mucho, mucho calor. Del Norte parece que es el equipo que mejor lo hace y pasa a Abarth. Fran Costoya entra en meta con la cara desencajada y me comenta que es uno de los peores días de su vida. Le han dado calambre en los isquios, muslos, espalda, abdominales, casi no puede ni andar. Hasta los mejores se deshidratan, creo.
Vamos al hostal y estos se dan una merecida ducha. Me cambio y me empiezo a concentrar porque es obvio que hay que salir a hacer todas las balizas. 9 km en una hora debe ser asequible. Y lo es. Celia se porta como una campeona, y conseguimos hacerlo todo con 5 minutos de sobra. Yo pensaba que la mayoría de los equipos serán capaces de picar todo, pero sólo 5 somos capaces. Al final va a resultar que no somos malos del todo. A destacar a Aurelio y Nieves, la mujer de Fran, que entren justitos pero con todo picado. Este hombre es mi ídolo, de verdad. Ha ganado todo y el lograr hacer la etapa tan bien con Nieves hace que esté más feliz que un niño de comunión. Necesito urgentemente una cerveza, tanta agua me está sentando mal. En cualquier caso, tanto correr y seguimos igual que al final de la 1 etapa.
Vuelvo a dormir con Fer. Estoy cansado, por lo que no tomo las medidas de seguridad necesarias, espero que se comporte el muchacho.
Nos despertamos con pocas ganas de correr. Celia sale a trotar un rato a ver si puede y decidimos que es mejor que salga Fer. No es cuestión de morir en el combate, queda mucho año. Llegamos a la salida y vemos que nos han mangado 15 puntos, Reclamamos y dicen que hemos picado mal una baliza por la tarde. Joder, nos va a costar mucho remontar. En fin, Fer y yo nos miramos y no es necesario decir más. Victoria o muerte... empezamos a despedirnos de nuestros hígados, porque nos los vamos a dejar en el monte.
Y lo dicho, salimos como animales... y picamos mal la primera baliza. Bueno, lo arreglo con la bici. Y a correr, a correr mucho. Tomamos confianza con las primeras balizas, que clavamos... hasta que vemos que la organización ha colocado mal una baliza (el código no coincide). Alguna duda, pero vamonos... seguimos acertando con las balizas y las atacamos muy bien, hasta las más complicadas. Pasamos muchos equipos que no han hecho las especiales, corremos hasta en los cortafuegos. Llega la hora de decidir: Fer, ¿hacemos el bucle de a tomar por culo? Son 80 puntos. Ni me mira y sale escopetado. Joder, da gusto la democracia. En mitad de una buena subida nos pillan Fran y Aure (que viene tirando de el con la gomilla). Nos miramos Fer y yo asombrados por lo fuerte que está. Arriba con ellos, abajo con ellos... hacemos una hora de etapa y finalmente se despegan. Siguen unos escalones por encima, al menos por encima mía, porque el Fer está fuerte como “la vinagre”. Mierda, se nos atraviesan las dos últimas balizas, que no encontramos. Estamos 5 o 6 equipos en mitad de aldeas, barrios o lo que sean y vemos que claramente vamos a penalizar. Nos da un pequeño bajón y tiramos a meta. Bueno, hemos salido a arriesgar y casi lo conseguimos. Nos encontramos con Planetas, Azimut… que viene bastante puteados también.
Bueno, al hostal a ducharnos. Nos lo tomamos con calma. Y llegando llama Paco diciendo que nos demos prisa, que hemos hecho terceros. A mi casi se me saltan los puntos de la alegría. Ole con ole.
Cervezas, vinito, pincho corto de la organización y a comer con Barrimore y familia. La verdad es que estamos contentos… y además, dejaremos de correr por una temporada.
La vuelta, menos coñazo de lo que esperábamos. Celia es un solete y se hace todo el viaje. Cantamos, nos reimos... la sorpresa del podium nos ha relajado.